
Actualmente, “más de la mitad de los médicos tienen 55 años o más”, dice el Dr. Alain Schmit, presidente de la Asociación de Médicos y Dentistas (AMMD). Y “es probable que la situación empeore drásticamente en los próximos años”. Esto se debe a que mucho médicos de la era “baby boomers” se jubilarán para 2025. Un problema importante, ya que el número de médicos en Luxeùburgo, ya hoy es muy inferior en comparación con los países vecinos. Y así lo confirman las cifras de Statec, con solo 90 médicos generales por cada 100.000 habitantes en 2018. Luxemburgo está muy por detrás de sus vecinos en la Gran Región en términos de asistencia médica.
Desde el año 2000, el número de médicos casi se ha duplicado y la densidad de médicos por cada 1.000 habitantes ha aumentado significativamente pero esta tendencia al alza no impide que la falta de médicos siga ganando terreno, la escasez ya se siente. Los pacientes encuentran cada vez más difícil obtener citas rápidamente.
En 2018, según las cifras del Fondo Nacional de Salud, Luxemburgo contaba con 477 médicos generales y 1.079 especialistas activos, con rangos de edad desigualmente distribuidos.
Ya en 2011, la Asociación de Estudiantes de Medicina de Luxemburgo (ALEM) había alertado a las autoridades públicas. “Se estima que se necesitan unos 100 médicos nuevos al año para garantizar la sostenibilidad del sistema”, dijo Frédéric Schwarz, presidente de la asociación. Sin embargo, las cifras presentadas por Etienne Schneider muestran apenas 89 médicos adicionales en los últimos cinco años de los 500 esperados.
Frédéric Schwarz presenta tres explicaciones: pacientes que consultan cada vez más, médicos jóvenes que se niegan a “trabajar 70 horas de trabajo por semana” y, finalmente, la ausencia de una licenciatura completa en Luxemburgo. Si los dos primeros aspectos se relacionan con la evolución de la sociedad, el tercer punto es el resultado de una decisión política, que tiene el efecto de empujar a los aspirantes médicos fuera de las fronteras.
Actualmente, los estudaintes que eligen estudiar medicina pueden hacer un primer año en Luxemburgo, pero para completar la licenciatura, se ven obligados a estudiar al extranjero. Aunque se han hecho esfuerzos con la apertura de un programa de licenciatura anunciado para el inicio del año académico 2020, y la creación de dos especializaciones, una en neurología y otra en oncología, la situación sigue siendo preocupante.
Desde el año 2000, el número de médicos casi se ha duplicado y la densidad de médicos por cada 1.000 habitantes ha aumentado significativamente pero esta tendencia al alza no impide que la falta de médicos siga ganando terreno, la escasez ya se siente. Los pacientes encuentran cada vez más difícil obtener citas rápidamente.
En 2018, según las cifras del Fondo Nacional de Salud, Luxemburgo contaba con 477 médicos generales y 1.079 especialistas activos, con rangos de edad desigualmente distribuidos.
Ya en 2011, la Asociación de Estudiantes de Medicina de Luxemburgo (ALEM) había alertado a las autoridades públicas. “Se estima que se necesitan unos 100 médicos nuevos al año para garantizar la sostenibilidad del sistema”, dijo Frédéric Schwarz, presidente de la asociación. Sin embargo, las cifras presentadas por Etienne Schneider muestran apenas 89 médicos adicionales en los últimos cinco años de los 500 esperados.
Frédéric Schwarz presenta tres explicaciones: pacientes que consultan cada vez más, médicos jóvenes que se niegan a “trabajar 70 horas de trabajo por semana” y, finalmente, la ausencia de una licenciatura completa en Luxemburgo. Si los dos primeros aspectos se relacionan con la evolución de la sociedad, el tercer punto es el resultado de una decisión política, que tiene el efecto de empujar a los aspirantes médicos fuera de las fronteras.
Actualmente, los estudaintes que eligen estudiar medicina pueden hacer un primer año en Luxemburgo, pero para completar la licenciatura, se ven obligados a estudiar al extranjero. Aunque se han hecho esfuerzos con la apertura de un programa de licenciatura anunciado para el inicio del año académico 2020, y la creación de dos especializaciones, una en neurología y otra en oncología, la situación sigue siendo preocupante.
Dejar una contestacion